Una pista de este posible delito fue detectada por agentes del Grupo de Menores de la Policía Nacional que observaron las visitas frecuentes que realizaba varios menores al domicilio de uno de los detenidos. Después de una amplia investigación, el equipo policial identificó a uno de los agresores y a las supuestas víctimas que confesaron haber recibido "tocamientos".
La excusa de ayuda social a cambio de dinero
El mayor de los acusados se valía de su condición de anciano para convencer a las menores para que acudiesen a su vivienda a ayudarle, en teoría, con su higiene personal a cambio de dinero. Una trampa con la que el octogenario lograba llevar a cabo su cometido y abusaba presuntamente sexualmente de ellas.
Por este motivo, el hombre fue detenido y posteriormente se realizó una entrada y registro en el domicilio, donde se localizó una agenda con nombre y número de teléfonos de varias jóvenes menores de edad.
Otro sospechoso convencía a base de regalos
El segundo de los arrestados conocía a las menores en la vía pública y conseguía que le acompañasen hasta el interior de su casa para recibir "regalos". Otro engaño con el que el individuo aproximaba a las jóvenes a su vivienda, reusando la entrada en el interior de la misma y ante la negativa de estas las intentaba besar y manosear.
El modus operandi del tercer detenido consistiría en acudir a citas con menores donde, a cambio de dinero, regalos o de invitarlas a comer, las llevaran en su automóvil a zonas aisladas donde mantenía relaciones sexuales con ellas.