Patrullas vecinales en Alicún de Ortega, un pequeño pueblo de Granada, han conseguido la detención de cuatro ladrones. Los vecinos los detectaron y se organizaron para darles caza comunicándose por móvil. Cogieron primero al conductor y le ataron. Otros dos escaparon por los tejados, pero se cayeron en una casa y les rodearon. También les ataron de pies y manos y esperaron a que llegase la Guardia Civil para detenerles. Habían robado unos días antes casas en vacías por la zona. Los vecinos se muestran orgullosos de lo que han hecho, pero están indignados porque no son ellos los que tienen que hacerlo. Dicen que en la zona no hay suficientes agentes de la Guardia Civil.