Cuando Holly Leam-Taylor envío por email a sus compañeras de trabajo en 'Deloitte' nueve preguntas sobre los chicos de la oficina no sabía la revolución que estaba a punto de iniciar. El test personal, con preguntas como "el chico más bueno de la oficina" o "el mejor para soñar con él", se extendió como la pólvora por la Red, según publica . De Australia a Nueva Zelanada, pasando por Estados Unidos, millones de correos electrónicos colapsaron el buzón de entrada de Leam-Taylor. Tras éste escándalo la joven envío una carta de renuncia a la empresa. Leam-Taylor asegura que era "una broma de Navidad" que se le escapó de las manos. el diario 'Daily Mail'