La tranquilidad del aburrido pueblo inglés de Waters Upton se ha visto rota por la llegada de Sophie Allen, una 'dominatrix' profesional que utiliza un salón del Ayuntamiento para sus particulares prácticas.
Los habitantes del tranquilo pueblo se han quedado sorprendidos al conocer las prácticas que se estaban celebrando en su pueblo sin que ellos se enterasen. Las clases de conducir, el yoga y el arte se sustituyeron por azotes, flagelaciones y otras prácticas sexuales perversas.
La joven, de 27 años, afirma que ha elegido este lugar para sus prácticas porque el suelo de madera resalta el ruido de sus tacones. Sophie se anuncia en Internet como Mistress Tia y busca futuros esclavos para sus sesiones.
Los vecinos del tranquilo pueblo están indignados con las prácticas que se llevan a cabo en la sala del Ayuntamiento pero, según el diario The Mirror, Sophie cree que es absurdo, "todo el mundo participa voluntariamente".
ÁLBUM: Revolución en el pueblo