Se llama Alberto Aguilar y ha tenido que ver cómo una secta le arrebataba a su hija, y lo que es más complicado vivir con la incomprensión de la gente que no entiende que con 18 años te puedan quitar la voluntad. Su tenacidad le llevó a remover cielo y tierra porque sólo un objetivo: traer de vuelta a su hija y consiguió un final feliz para los suyos.
Patricia Cervera lleva años luchando por salvar a su hija de la anorexia, que sufre la enfermedad desde los 13 años teniendo ahora 21. Esta madre coraje vio cómo en Andalucía no le daban una atención especializada a su hija al no existir Unidades de TCA (Trastorno de Conducta Alimentaria) en toda la comunidad. Hoy en día Patricia tiene que viajar desde Granada hasta Ciudad Real para poder ver a su hija, ingresada en una de esas unidades. Mientras tanto, ha batallado para que la Junta de Andalucía ponga solución a este problema que afecta a más de 7.000 personas en la comunidad.
Arantxa Mejías lucha desde los 25 años contra los fondos buitre. Vio cómo su casa era vendida a Fidere, el fondo buitre al que la Comunidad de Madrid vendió pisos de protección oficial. Desde entonces alza la voz para defender el derecho constitucional de que todas las personas tienen derecho a una vivienda digna.