Todo comenzó con una información de Lydia Lozano. La colaboradora firmaba que Raquel Bollo, estaba "fatal" porque según había podido saber, existían unas grabaciones que podrían afectarle. La aludida desmentía que estas cintas pudieran existir pero la polémica continuaba.
Finalmente, Lydia Lozano y ambas se fundían en un abrazo. “Cuando tocas una tecla, vienen más y veo a Raquel está muy mal, como yo no sé si la persona me la va a dar ni voy a apostar más, prefiero pedir perdón porque aquí se ha desencadenado algo por mi culpa”, decía Lydia. Raquel, por su parte, aceptaba la disculpas: “Solo te digo que aprendas un poco porque hoy soy yo, mañana tú, pasado Rosa, hay que ponerse en la piel del otro”.
Sin embargo, estas disculpas no acabaron con la polémica. “Me parece una indecencia”, decía Mila Ximénez, “no puedes activar una bomba y luego pedir perdón”. “Discrepo absolutamente”, replicaba Lydia y el enfrentamiento entre las colaboradoras se recrudecía.
“Lo que estás haciendo es indecente, no tienes informador, ni cintas ni nada, te conozco”, continuaba Mila y Lydia plantaba cara: “¿Yo he hablado contigo? Te encantaría que yo me fuera de aquí”; “Yo no lo quiero, tú sí que te regodeas”, replicaba la aludida.
Lydia no podía evitar las lágrimas, Jorge Javier Vázquez intentaba calmar la situación pero las críticas de los colaboradores continuaban. Carlota Corredera, directora del programa preguntaba a Mila si de verdad quería ver a Lydia fuera y ella era rotunda: “Lydia me parece fundamental ¿Qué tiene que ver una cosa con la otra?”.
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