“El museo no se abre porque no se ponen de acuerdo económicamente”, comenzaba a decir Gloria Camila, hija de Ortega Cano y Rocío Jurado. Explicaba que el museo dedicado a su madre lleva seis años terminado y añadía: “No se abre porque a ella no le da la gana, y siento ser así, pero no hay por qué engañarse y porque económicamente no le interesa”.