La colaboradora no estaba muy convencida en los ensayos de si lo estaba haciendo bien o no, "está todo fatal", ha dicho. Lydia no se sentía sexy y se lo ha hecho saber a su coreógrafo. Para solucionarlo, Pol ha decidido colocarle dos huevos en los pies para que pareciese que estaba bailando con zapatos y, el resultado no ha sido muy bueno.