Aunque Jacobo Ostos, hijo del difunto torero Jaime Ostos, es abogado de profesión, no ejerce como tal y se dedica a su verdadera pasión: el mundo de la noche. El joven de 38 años es DJ y durante la pandemia se hicieron famosas sus presuntas fiestas ilegales.
Aunque él ha negado ante el polígrafo de Conchita que se produjesen esas reuniones, lo cierto es que la máquina ha detectado sus mentiras y ha dejado al descubierto la verdad sobre las fiestas clandestinas de Jacobo.
Jacobo no ha querido dar detalles sobre las personas que acudían a sus fiestas, reuniones de amigos que el DJ organizaba en el local que tiene en su domicilio. Sin embargo, según las informaciones del 'Deluxe' en estas fiestas era habitual la presencia de famosas que sirvieran como reclamo para el evento.
Rafa Mora ha intentado echarle un cable a su amigo asegurando que él nunca ha pagado por asistir a una de esas fiestas, sin embargo, el polígrafo de Conchita determina que Jacobo se habría llegado a embolsar hasta 360.000 euros cobrando entradas.