La emoción de Alejandro Jiménez al recordar la muerte de María Jiménez: "Mamá, es la hora de dormir"

  • Alejandro Jiménez: "Luego te das cuenta que cuando no está tu madre estás solo en el mundo"

  • Un total de 30.000 personas acudieron a la capilla ardiente de María Jiménez

  • María Jiménez estuvo en coma dos meses: para Alejandro Jiménez, su hijo, fue el peor momento

La cantante María Jiménez murió el 7 de septiembre de 2023 en su casa del barrio de Triana, en Sevilla, a los 73 años de edad y rodeada de su familia. Alejandro Jiménez ha recordado en 'De viernes' cómo le contó su madre que tenía cáncer de mama. Fue en un trayecto a Sevilla: "Me dijo: 'Te tengo que dar una noticia. Tengo cáncer de mama'". No obstante, el hijo de María Jiménez apunta que la vida siguió para ella con normalidad.

Pero posteriormente tuvo cáncer de garganta: "Otro obstáculo más". La cosa no iba a acabar aquí. María Jiménez estuvo en coma durante dos meses. "Eso es lo peor", recuerda Alejandro. María Jiménez volvió a resurgir, sacando otro disco e intentando tirar para adelante a pesar de los baches que le iba poniendo la vida. "Hasta que llega el cáncer de pulmón hace dos años, que ahí ya es cuando empieza a verle las orejas al lobo".

Alejandro Jiménez se ha emocionado al recordar las palabras que le dijo su madre. María Jiménez le transmitió que le quería y eso le hizo pensar que ya se estaba preparando para cuando no estuviera que supiera bien lo que sentía por él y el amor tan profundo que tenía hacia su hijo. Ha explicado que de repente no podía mover sus piernas y rápidamente fue a donde se encontraba para pasar los últimos instantes de su vida con ella.

Sus últimas palabras hacia su madre fueron: "Mamá, es la hora de dormir". "No sé si ella se dio cuenta o no, pero...", señala Alejandro rompiendo a llorar. "Luego te das cuenta que cuando no está tu madre estás solo en el mundo. Ella estaba orgullosa y contenta. Y se fue sabiendo que estaba todo más o menos encauzado", recuerda Alejandro Jiménez. Una muerte que provocó un gran impacto en la sociedad y con un funeral lleno de eminencias, despidiéndose de una auténtica leyenda española de la música. Pasaron un total de 30.000 personas por la capilla ardiente.