¡Julio Escartín se lleva el bote de 'Pasapalabra' tras una remontada épica!
Nada parecía presagiar el desenlace del programa de hoy. En una primera parte, Pablo Díaz ha acertado 15 palabras consecutivas y Julio Escartín no ha sido capaz de acertar una sola. El hasta ahora campeón llevaba 18 aciertos y Julio cuatro cuando éste, del tirón, ha recortado la distancia resolviendo correctamente nueve enunciados, lo que ha sumado 13 aciertos a su marcador.
Al completar la primera vuelta, Pablo contaba con 22 aciertos, mientras que Julio ya había alcanzado los 20. Pero la letra U se le ha resistido a su contrincante a tan solo una palabra de conseguir ‘El Bote’, mientras que Julio ha acertado en la segunda vuelta los cuatro enunciados que le faltaban para completar el ‘Rosco’.
La pregunta final que ha propiciado el triunfo de Julio no la olvidará jamás: ‘Contiene la Y: montaña más alta del Sistema Ibérico’. Como buen aragonés y con una sonrisa de oreja a oreja al saber que esa palabra le reportaría 318.000 euros, ha respondido con seguridad: ‘Moncayo’.
Un emocionado Pablo Díaz, que durante 47 programas consecutivos ha demostrado estar a la altura de los mejores tras quedarse en repetidas ocasiones a las puertas de completarlo, se ha despedido del espacio que presenta Christian Gálvez con 49.800 euros acumulados.
Zaragozano de nacimiento y licenciado en Psicología, Julio Escartín ejerce como profesor de música de 1º de la ESO en el Instituto de Educación Secundaria Miguel Catalán en Zaragoza. Compaginó sus años de carrera con sus estudios de piano, pero la preparación de las oposiciones a profesor le llevó a abandonar su pasión por este instrumento.
Casado desde hace 30 años, tiene cuatros hijos de 27, 25, 22 y 18 años. Es un melómano apasionado de la música clásica y del teatro musical al que le hubiera gustado dedicarse. Hace dos años estuvo en un curso sobre este género en Londres, donde tuvo que bailar y cantar en el idioma de Shakespeare.
Certifica que ‘Pasapalabra’ es su programa de cabecera y no se lo pierde nunca. Con el apoyo de su familia, Julio decidió hace dos años presentarse al proceso de selección del concurso y desde entonces ha hecho muchos ‘roscos’, tanto del programa como de su juego de mesa. Además, como herramienta suplementaria a su preparación, creó un diccionario inverso, en el que primero aparecen las definiciones y luego las palabras, con casi 80.000 definiciones (tanto palabras comunes como propias).
Tras llevarse ‘El Bote’, a Julio le gustaría comprarse un piano de cola, realizar un curso de dirección de orquesta en Londres y cubrir económicamente las necesidades académicas de sus hijos, en las que se incluyen los estudios de Bellas Artes en Barcelona para una de sus hijas, un Erasmus en Dublín para otra y la grabación del disco de su hija mayor, que toca la flauta de pico y es componente de un dúo musical.
