Ana ha cuidado de su madre enferma hasta que ésta falleció hace unos meses. Ahora Mar, su hermana, quiere cobrar su parte de la herencia y para ello está dispuesta a dejar a Ana sin casa. La madre de Mar y de Ana les dejó en herencia su piso de toda la vida. Mar quiere venderlo y cobrar su 50% mientras que Ana se opone porque ese piso es mucho más que la casa de su madre: es el único sitio que tiene a dónde ir. ¿Puede obligarte tu hermana a vender el piso en el que vives para cobrar la herencia familiar?

Darío Jurado decidirá si Mar puede o no vender el piso de su madre, en el que vive su hermana Ana y sus sobrinos.

Los defensores Elisa Beni y Alfonso Merlos interrogan a estas dos hermanas que deberán responder con la verdad y nada más que la verdad a cada una de las preguntas que se les planteen.

Nieves Herrero e Irma Soriano se ven las caras en este debate en el que, una vez más, se demostrará que las herencias en paz son casi un imposible.