Coche y niebla: el truco de las tres V para conducir cuando hay poca visibilidad
El truco de las tres V es una regla fácil de memorizar para conducir seguros cuando hay niebla
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La niebla es un clásico del invierno, sobre todo en los días como hoy en los que el tiempo es estable. Cuando las gotitas de agua sobre el suelo se enfrían al caer la noche, se condensan y forman estos bancos de niebla que son en realidad nubes muy bajas, y pueden reducir la visibilidad hasta dejarnos a ciegas al volante, por ello es fundamental conocer algunos ‘tips’ que pueden salvarnos la vida. ¿Sabes el truco de las V?
Hay que tener claras dos cosas fundamentales antes de lanzarse a conducir con niebla, aunque después profundizaremos en otras claves para ir en el coche seguros. Son las siguientes: ten claro cómo poner la luz antiniebla, y conduce más despacio de lo habitual.
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El truco de las tres V para conducir con niebla
La regla de las tres V es una invención de la Guardia Civil, que lo pone muy fácil para memorizar en caso de que te pille la niebla al volante. Lo explica en el siguiente tuit:
Cuando te sorprenda la niebla respeta la regla de las 3V.
— Guardia Civil (@guardiacivil) 19 de noviembre de 2020
Ejemplo: Visibilidad (50 m.) = velocidad (50Km/h) = vehículo delantero a 50 m.
¡Sé prudente! #062 📞 #SeguridadVial #ViajeSeguro
Información estado carreteras:@InformacionDGThttps://t.co/UkjIr39dj9
La regla está clara: con una visibilidad de 50 metros, circular a 50 km/h y mantener el vehículo delantero a una distancia mínima de 50 metros.
A continuación entramos en algunos detalles importantes:
- En primer lugar, es fundamental dejar la debida distancia con el coche de delante, puesto que tendrás poco margen para frenar en caso de que frene, o si te encuentras un vehículo parado en el arcén.
- Adapta la velocidad a las circunstancias. Si hay mucha niebla, circula muy despacio para poder reaccionar ante cualquier imprevisto.
- Debes tener en cuenta que, si hay niebla, también hay humedad. Por tanto debes conducir con cuidado, sin giros drásticos ni frenazos para no patinar y con el depósito de agua de los limpiaparabrisas preparados porque lo necesitarás. Además, si hace mucho frío el agua de la calzada se puede congelar y crear placas de hielo.
- Olvida las luces largas porque no sirven de nada con niebla (por eso existen las luces antiniebla). Las largas se reflejarán en la propia niebla y te deslumbrarán.
- Las marcas longitudinales de la carretera son la mejor ayuda para un conductor cuando hay niebla, ya que siempre son visibles y nos ayudan a llevar el coche recto.
- No te detengas en el arcén, puede ser muy peligroso con la escasa visibilidad. Busca una salida o área de servicio donde parar. No obstante, si sufres una avería y no te queda más remedio que interrumpirte en el arcén, asegúrate de que todos los ocupantes del vehículo están fuera en un lugar seguro apartado de la carretera.