La pequeña villa rural en Asturias donde veraneaba la reina Letizia junto a sus abuelos

MadridLa reina Letizia siempre ha demostrado ser una gran profesional, orgullosa del papel que desempeñó durante sus años como periodista y feliz de poder continuar dando voz a las cuestiones que considera que deben estar en foco también como Reina. Siempre está pendiente de la actualidad, de las tendencias y de lo que sucede en el mundo. 

Más allá de su lado más profesional, también deja entrever otras facetas más relacionadas con su vida personal. Es una madre orgullosa, pero también es una asturiana feliz de poder llevar la esencia de su tierra allí por donde pasa. Oviedo es el lugar que le vio nacer y, aunque hace años que la capital es su hogar, no olvida esa tierra a la que vuelve con ilusión cada año, por trabajo por los Premios Princesa de Asturias, pero también por el placer de regresar a un lugar que fue su hogar y en la que pasó grandes veranos junto a su familia. 

Sardeu: la villa asturiana donde veraneaba la reina Letizia 

La reina Letizia tiene un cariño especial a Asturias, en concreto a esta pequeña villa cercana a Ribadesella, donde pasaba los veranos junto a sus abuelos, Menchu Álvarez del Valle y José Luis Ortiz. Sardeu es una población pequeña, de unos 30 habitantes, un lugar ideal que se convertía en su refugio durante los veranos, un rincón en el que disfrutar del aire puro y la naturaleza, uno de los puntos fuertes de esta zona, que destaca por sus espacios, llenos de belleza y vida. 

Algo que caracteriza este rincón del país son sus vistas, es un pueblo de casas dispersas, puede haber una gran distancia entre ellas, lo que podría parecer un tanto incómodo para el día a día, pero que hace que puedan disfrutar del espacio que les rodea, sus cumbres y sus valles. Un espacio que enamoró a la abuela de la Reina, motivo por el que convirtió este lugar en su hogar junto a su marido y quiso pasar en él sus últimos momentos. 

Este lugar parece especialmente pensado para que los amantes de la tranquilidad puedan disfrutar al máximo, pero también está lo suficientemente cerca de lugares que permiten salirse de la rutina, como Ribadesella, que se encuentra a unos cinco kilómetros. Este rincón es ideal para disfrutar de la naturaleza, de las rutas de senderismo y también está bastante cerca del Cantábrico. 

Quienes quieran disfrutar de todo lo que la zona tiene para ofrecer, además de hacer parada en Sardeu y caminar entre sus casas, dispersas en una orografía irregular y con pendientes bastante pronunciadas, no pueden perderse otros pueblos de la zona. Puntos históricos con construcciones que han trascendido al tiempo, caminos que invitan a disfrutar de la sombra de los árboles, cuevas que esconden detalles solo disponibles para los más atrevidos… 

Un rincón que se convirtió en hogar de los abuelos de la reina Letizia y que vio como una joven inquieta crecía hasta convertirse en la mujer que es hoy día.