Martina tiene dieciséis años y lleva cuatro haciendo pole dance. Quiere transmitir un mensaje a todas las chicas que no se aceptan por su físico: “Somos únicos y debemos querernos”, asegura antes de mostrar todo su talento sobre el escenario de ‘Got Talent’.
Su actuación habla de sí misma. De pequeña quería ser como una modelo o una influencer, se miraba al espejo, se veía defectos y se enfadaba porque no se aceptaba. Pero todo eso ha cambiado tras un duro proceso. Ahora se acepta a sí misma y está orgullosa de ello.
Esta actuación de pole dance no ha sido como las demás, sino que contaba con un espejo en la base donde se podía reflejar la artista. La belleza y la delicadeza de su actuación han sido muy destacadas por el jurado.