Fernando está cansado de que todo el mundo se queje por la comida y por la compra semanal que ha hecho y en su nueva postura de hacer lo que le dé la gana, ha tomado la decisión de tomarse una piña de postre y se ha liado la marimorena. Bárbara ha sido la primera en lanzarse a por él y recriminarle que se estuviera comiendo todo sin pensar en los demás. Una vez más, Fernando se ha visto envuelto en una tensa discusión con Bárbara y Adara en la que aunque no quería, ha terminado entrando.