La FAPE otorgará, a título póstumo, el carné de número al poeta Miguel Hernández

El poeta alicantino, Miguel Hernández Gilabert, recibirá este martes el carné de número que le acredita como periodista en la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE), según ha informado la Asociación de la Prensa de Alicante en un comunicado.

El acto de entrega de la acreditación periodística a Miguel Hernández, que recibirá su nieta María José Hernández y su nuera Lucía Izquierdo, se celebrará a las 19.00 horas de este martes en el Museo Arqueológico Provincial de Alicante (MARQ).

El ministro de la Presidencia del Gobierno de España, Ramón Jáuregui ha aceptado la presidencia; y oficiará como anfitriona la presidenta de la Diputación de Alicante, Luisa Pastor. Completarán la mesa: la presidenta de la FAPE, Elsa González; el presidente de la APA, Leonardo Tomás; y el promotor de la idea Enrique Cerdán Tato.

La Junta Directiva de la Asociación de la Prensa de Alicante (APA), por sugerencia del asociado Enrique Cerdán Tato, solicitó la concesión de ese carné de número al poeta como homenaje a título póstumo por su condición de periodista.

A los 21 años, Miguel Hernández solicitó de su mentor, el canónigo y después vicario de la diócesis de Orihuela, don Luis Almarcha, el ingreso en la escuela de Periodismo de 'El Debate'. Posteriormente, colaboró en el diario La Verdad, no sólo con poemas, sino con comentarios y críticas literarias. Antes había escrito en diversos periódicos de Orihuela y Alicante, pero fue durante la Guerra Civil, cuando fundó diversas publicaciones periódicas y trabajó en innumerables medios, con crónicas desde el frente.

Cuando fue apresado y procesado por la dictadura, el juez instructor se inhibió a favor del Juzgado Militar Especial de Prensa de Madrid, dada su "calidad de periodista", como así consta en el documento que corresponde al sumarísimo de urgencia 21.001, en el que gran parte de las pruebas las constituyen recortes de prensa con textos del encartado, por el que se le condenó a muerte, aunque seis meses después, se le conmutó por 30 años de reclusión mayor.