Guaidó avisa de su regreso a Venezuela y convoca nuevas protestas contra el régimen de Maduro

El líder de la oposición venezolana, Juan Guaidó, informó ayer desde Quito, Ecuador, que emprende el regreso a casa después de una visita al país y convocó nuevas protestas la próxima semana contra el presidente Nicolás Maduro. Guaidó ha pasado los últimos días recorriendo países latinoamericanos para reunir apoyo en su campaña para formar un gobierno de transición y expulsar a Maduro, a quien denuncia como un usurpador ilegítimo.

Visitó Brasil, Argentina y Paraguay después de pasar por Colombia la semana pasada para coordinar los esfuerzos para enviar “ayuda humanitaria” a su país, aunque los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado venezolano no permitieron la entrada de esa "ayuda", que para el Gobierno de Maduro era una operación de invasión encubierta extranjera. Ni la ONU, ni Cruz Roja, ni Cáritas ni ninguna asociación internacional de derechos humanos han calificado esa ayuda de "ayuda humanitaria" y ningún organismo internacional ha decretado una crisis humanitaria en el país caribeño.

Guaidó no ha informado de cuándo exactamente o de cómo regresaría a Venezuela. Se espera que salga de Ecuador a las 9:30 a.m. hora local del domingo, según el calendario del gobierno ecuatoriano para su visita. Su regreso abre la posibilidad de que las autoridades venezolanas traten de arrestarlo, al haberse saltado Guaidó el dictamen del Tribunal Supremo de Venezuela, que le impuso la prohibición de salir del país después de que se autoproclamara presidente del país, e invocara la Constitución venezolana el 23 de enero para asumir una presidencia interina, que la mayoría de las naciones occidentales ahora reconocen como legítimas, pero que no reconoce ni la ONU ni muchos países que apoyan al Gobierno de Maduro.

Guaidó dijo que los venezolanos deberían volver a salir a las calles el lunes y martes, a pesar de que Venezuela, como otros países latinoamericanos, celebre el Carnaval. Guaidó ha pedido a sus patrocinadores internacionales que impongan medidas más severas para presionar a Maduro tras la fallida entrada de material de ayuda internacional. Guaidó pidió que "todas las opciones se mantengan abiertas", incluyendo la invasión armada, la cual rechaza incluso, por ahora, EEUU. Si bien el gobierno del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, no ha descartado la intervención militar para desalojar a Maduro, se considera poco probable y sus aliados latinoamericanos han alentado una combinación de sanciones y diplomacia.

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