Se dispara la fiebre por las bicicletas por el miedo al contagio en los transportes públicos

Este miércoles 3 de mayo se celebra el Día Internacional de la Bicicleta con la que se pretende que los Estados presten una atención especial a este medio de transporte en las estrategias de desarrollo de movilidad. La lucha contra la pandemia de coronavirus está poniendo de manifiesto que muchos ciudadanos confían en el vehículo de dos ruedas como forma de mantener la distancia social y evitar así contagios, algo, especialmente complicado en los masificados medios de transporte colectivos.

La pasada semana, la Dirección General de Tráfico (DGT) lanzó en sus redes sociales una campaña divulgativa para fomentar el uso de la bicicleta en las ciudades, haciéndolo coincidir con el avance de la fase de desescalada en el estado de alarma decretado por el COVID-19 que está generando más movilidad.

"El coronavirus ha dejado y está dejando mucho dolor y fallecidos pero también ciudades más limpias, menos ruidosas y más respirables, hasta ahora desconocidas y descubiertas por los ciudadanos que no se resignan a que la nueva normalidad vuelva a suponer congestión y atascos", comenta la DGT en un comunicado.

Añade que son numerosas las iniciativas relacionadas con la movilidad ciclista que se están desarrollando en el mundo y que se han convertido en prioritarias desde la aparición de la pandemia pero recuerda que la promoción de la bicicleta ya estaba en la agenda antes de que el coronavirus surgiera.

Colectivos de defensa de la bicicleta han convocado para esta tarde a las 20.30 horas una cadena ciclista en el Paseo de Recoletos para demandar apoyo a la bici durante la desescalada y para visibilizarla como medio de transporte.

Las asociaciones firmantes consideran que la bicicleta es un elemento estratégico en la movilidad durante la desescalada "porque no produce atascos, contaminación ni gases de efecto invernadero y permite mantener la distancia interpersonal". "Como ventaja adicional, pedalear con regularidad reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares, derrames cerebrales, ciertos tipos de cáncer o diabetes y de sufrir hipertensión", señalan.

En este contexto, los convocantes recuerdan que muchas ciudades en el mundo han comenzado a realizar planes de emergencia para fomentar los desplazamientos en bicicleta. En España destacan algunas ciudades como Barcelona, que pondrá en marcha 21 kilómetros de carriles bici, Logroño con su plan 'Calles Abiertas' o el plan de transición a una nueva movilidad de Valladolid.

"Sin embargo, las medidas de emergencia se adivinan todavía tímidas a nivel general e insuficientes para que la bici tenga una representatividad real en el reparto modal de transporte. Las medidas de emergencia llegan a ciudades en las que la bici no era protagonista en el transporte y, en general, sólo benefician al centro de la ciudad, por lo que no serán suficientes", advierten las entidades convocantes.

Las 5 regiones españolas que más utilizan la bicicleta

La comunidad en la que más demanda de bicicletas hay es Madrid, con un 20 % respecto al total. A continuación le sigue Cataluña, con un 16 %, y Andalucía con un 14 %. La demanda de bicicletas también es muy alta en Valencia, 10 %, y en el País Vasco, 7 %.

Es muy probable que esta tendencia siga al alza, ya que ciudades como Valencia o Barcelona ya han anunciado que adaptarán sus calles para dar más espacio a los ciclistas, y, en esta última, el Ayuntamiento también dará subvenciones directas para la compra de bicis o patinetes. Todo ello con el objetivo de fomentar la movilidad sostenible y descongestionar el transporte público en un momento en el que la distancia social sigue siendo necesaria.