Un colectivo cristiano paquistaní dice que el caso de Asia Bibi sigue "abierto"

En declaraciones a Efe, el director de este colectivo con base en la ciudad de Rawalpindi, Mehbud Sada, opinó que la sociedad civil paquistaní, incluidos clérigos musulmanes, coincide en que se está haciendo un uso inapropiado de la ley.

La campesina, de 45 años, fue condenada a la pena de muerte el pasado día 8 de noviembre por una corte del distrito de Nankana, en la provincia oriental de Punjab, bajo los artículos 295 B y C del código penal, donde se hallan tipificados los casos de blasfemia.

Bibi tuvo una disputa con otras compañeras que se encargaban de portar agua cuando profirió la supuesta blasfemia, pero fue un mulá de la zona quien la denunció.

Su abogado ha apelado la sentencia ante el Tribunal Superior de Lahore, un proceso legal que podría alargarse en el tiempo, pero también existe la posibilidad de que el jefe de Estado, Asif Alí Zardari, firme un perdón presidencial.

El gobernador de Punjab, Salman Tasir, visitó días atrás a Bibi en la prisión y, pese a que constató que legalmente no puede conmutar la pena, sugirió que era posible que Zardari dictara un perdón presidencial.

La fuente consultada por Efe añadió que si el caso sigue su proceso en los tribunales, podría tener importancia el hecho de que la campesina confesara haber pronunciado la blasfemia, algo que hasta ahora ha negado.

El ministro de Minorías, Shahbaz Bhatti, que ha lamentado que la ley antiblasfemia del país se utilice para "venganzas políticas" y para saldar "enemistades religiosas", debe entregar mañana un informe sobre el caso a Zardari.