La carrera de Urdangarín: de tenerlo todo a ingresar en prisión

Iñaki Urgangarín lo tenía todo: éxito olímpico, una novia hija de reyes… Entró en la Familia Real entre vítores, pero salió entre los abucheos de la gente. Ha pasado de tenerlo todo a no tener nada. En el año 2000 cambia el balón por los negocios, que salían redondos. Junto a Diego Torres, su socio, crea el Instituto Noos, una ONG sin ánimo de lucro a través de la cual desvían cerca de seis millones de euros de dinero público. Ofrecen servicios de representación con presupuestos desorbitados que a veces, ni si quieran se realizan, a administraciones públicas. Baleares es una de ellas y con el Caso Palma se descubre el pastel. Zarzuela le aparta de los actos oficiales. Comienza una carrera desesperada, el juez Castro le imputa y le cita a declarar. Es su particular bajada a los infiernos. Urdangarín carga contra su socio, exculpa a su mujer y asegura que sus negocios contaban con el conocimiento y visto bueno de la Casa Real. Felipe VI impone un cordón sanitario con su cuñado y no vuelve a aparecer con él en público. También marca distancia con su hermana Cristina y les termina quitando el Ducado. Tras vender su palacete de Pedralbes, Urdangarín se recluye en Suiza, sin trabajo, sin apenas amigos y refugiado en su familia. Sin sombra de lo que fue, le espera una temporada a la sombra.