“Al principio cuando empezaba a cantar flamenco me vestía de negro, con oro, el pelo largo hacia atrás, pero años más tarde entendí que el hábito no hace al monje”, dice Ezequiel. Aunque no tenga aspecto de gitano, su voz es puro flamenco.
“Al principio cuando empezaba a cantar flamenco me vestía de negro, con oro, el pelo largo hacia atrás, pero años más tarde entendí que el hábito no hace al monje”, dice Ezequiel. Aunque no tenga aspecto de gitano, su voz es puro flamenco.