Massimo irrumpe en la iglesia y declara su amor a Candela: "Eres lo único que quiero"

  • "Chino, sigo enamorado de Candela y no me iré sin ella", advierte el italiano

Han pasado seis meses desde el romántico reencuentro entre Candela y Massimo en Praga. A pesar de conseguir escapar de los guardias de seguridad en el aeropuerto, el agente encargado de detener al italiano encuentra el nido de amor de la pareja en la capital de la República Checa. Mientras la bailarina sale a buscar café, el empresario decide marcharse sin despedirse y sin contar a su amante que debe ingresar en la cárcel.

Una vez puesto en libertad, Massimo no duda en volar hasta Sevilla para buscar a Candela. Cuando llega a la ciudad Andaluza descubre que su academia de baile está "cerrada por boda". Corre hasta el portal de la joven y los vecinos de ésta le informan de que por la hora que es, debe estar ya en la iglesia. Temiéndose lo peor, el romano comienza una carrera contra reloj por llegar a tiempo a la boda antes de que sea demasiado tarde. "¡Te quiero, no te cases con él!", grita entrando en el edificio. Sin embargo, Salvatori descubre que la que se casa no es Candela, sino su amiga Ana.

"Estoy aquí por ti, eres lo único que quiero", le confiesa el italiano."Chino, estoy enamorado de Candela y no me pienso ir sin ella", advierte. "Hacer lo que queráis, hace tiempo que yo y Candela no estamos juntos, pero como le hagas daño te reviento", contesta éste. "¿Crees que puedes venir aquí seis meses después y montar la escenita?", pregunta indignada la bailaora. Al ver el que debería ser el mejor día de su vida interrumpido, Ana monta en cólera y les pide que esperan a hablar cuando la boda haya finalizado.