Lady Gaga se ha tomado unas merecidas vacaciones tras el arduo trabajo al que se ha sometido durante los últimos meses. Ha decidido escapar de un calendario repleto de conciertos para disfrutar del amor de su guapa acompañante en un yate que navega por las costas francesas de Saint Tropez.
La cantante de 'Bad Romance' se enroló en el 'barco del amor' para disfrutar de la pasión con su misteriosa compañera. Se les pudo ver retozando en la cubierta del yate en una actitud bastante cariñosa para el gozo de los paparazzis que las observaban. Los que presenciaron la tórrida escena aseguran que "no podían quitarse las manos de encima". Gaga hizo este descanso en Saint Tropez aprovechando que acababa de dar un concierto en el Teatro Bercy de Paris.
"Las chicas estaban una encima de la otra" explica una fuente de DailyMail. "Parecía que se lo estaban pasando muy bien. Después de los juegos, la pareja tuvo tiempo de relajarse y disfrutar una merecida taza de té y un refresco" añadió la fuente.
La joven artista de 24 años necesitaba unas vacaciones tras los problemas de salud que ha tenido durante su última gira. En varias ocasiones Lady Gaga se ha desmayado en mitad del escenario y los rumores apuntaban a que sufría transtornos alimenticios. Ella lo desmintió, pero su círculo más cercano aseguraba que todo se debía al exceso de trabajo y a la presión a la que Gaga estaba sometida.
Lady Gaga despide a sus guardaespaldas
FOTOGALERIA: Lady Gaga, más provocativa que nunca