La segunda revolución cuántica, cada vez más cerca
Los supercomputadores cuánticos, aún en desarrollo, se espera que sean más rupturistas que la IA generativa
Naciones Unidas ha declarado este 2025 como año internacional de la ciencia y la tecnología cuántica
La supercomputación cuántica está llamada a revolucionar múltiples sectores con un procesamiento muy superior
Este martes, 11 de febrero, se celebra el día mundial de la mujer y la niña en la ciencia. Una reivindicación histórica que cumple una década este 2025, desde su declaración por Naciones Unidas, tras siglos de invisibilización. Como doctora en física cuántica y ahora escritora trabaja Sonia Fernández-Vidal, que acerca el complejo universo cuántico, también en su año internacional, a los niños, con una trilogía "La puerta de los tres cerrojos" y una precuela, "La semilla de una revolución". Cuatro libros en los que se mezcla la fantasía de sus personajes y la realidad de la ciencia cuántica y que ya han vendido casi medio millón de ejemplares.
Una ciencia fundamental en nuestro pasado y presente y con un futuro, se espera, aún más revolucionario. Porque no hay nada más cuántico que poder estar en dos lugares a la vez o teletransportarnos a otro escenario. Son algunos conceptos básicos de la física cuántica que Fernández-Vidal conoce como pocas personas en el mundo tras trabajar en el acelerador de partículas europeo del CERN y, también, en el laboratorio de Los Álamos, en Nuevo México (EE.UU.), donde se desarrollaron las bombas atómicas de Hiroshima y Nagasaki (Japón).
Porque la centenaria ciencia y tecnología cuántica es capaz de lo peor del ser humano, como se demostró en 1945, pero también de los grandes avances de hoy. Con una gran revolución a las puertas: los supercomputadores cuánticos, todavía en desarrollo, en una carrera que lideran EE.UU. y China, con la Unión Europea tratando de no quedarse atrás. De estos superordenadores cuánticos se espera un rendimiento y potencial inigualable, con múltiples aplicaciones en sectores clave como la medicina, la biología, la lucha contra el calentamiento global o la potenciación de la inteligencia artificial generativa, entre otros campos.
Destacan éxitos como el chip cuántico de Google, 'Willow'
De momento, ya hay éxitos como el chip cuántico de Google, 'Willow', que es casi 4 veces más potente que el supercomputador cuántico del Barcelona Supercomputing Center (BSC-CNS) presentado el pasado jueves 6 de febrero. El desarrollo de la tecnológica estadounidense, que encabeza el leonés Sergio Boixo, es capaz de resolver en 5 minutos, según la compañía, problemas que con los ordenadores tradicionales se necesitarían 10 cuatrillones de años.
Por delante quedan múltiples desafíos para estas supercomputadoras, como su abastecimiento energético, la seguridad tecnológica y la inestabilidad de sus 'qubits'. Esta unidad básica, tal y como explica la compañía puntera Quantinuum de Honeywell, funciona como músicos individuales que son mejores dentro de una orquesta que, cuanto más crece en número, más puede corregir su sensibilidad y posibles errores, su principal talón de Aquiles en este momento. Si supera esos obstáculos, los principales laboratorios apuntan que estos superordenadores cuánticos podrían ser una realidad en pocos años.
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