El teléfono comenzó a producir sonidos continuados y rápidos, la pantalla de vidrio se cuarteó y explotó, arrojando pequeños fragmentos que se incrustaron en la cara del chico.
En ese momento, fue a su casa donde su madre, quien posee conocimientos de medicina y nutrición, le procuró los primeros auxilios.
El adolescente y una amiga, que se encontraba con él en el momento de los hechos, aseguraron que el teléfono no estaba excesivamente caliente antes de que explotase.
"Lo tenía a 30 centímetros de mi cara cuando sentí como un grano de arena en el ojo", ha declarado el adolescente.
Las 'explicaciones' de Apple
En busca de explicaciones, la madre del joven accidentado llamó al servició de atención al cliente de Apple. Al parecer, la persona que le contestó le dijo que eso "no era posible". Incluso hizo alusión a un iPod que explotó en Liverpool y le dijo a la mujer que si buscaba por Google podría darse cuenta de que "los extraterrestres existen".
Después habló con el servicio de Apple en La Provence. Aquí fueron más amables. "Ciertos clientes nos han dicho que hay baterías que se han quemado. En la mayoría de los casos, reemplazamos el producto. Pero nunca habíamos oído hablar de un iPhone que haya explotado. Es un caso insólito", le aseguraron.
Tras lo sucedido se han puesto en contacto con un abogado y no descartan poner una demanda a la compañía "ya que se trata de un producto de calidad" que, al parecer costó más de 300 . RSO
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