"Controlamos cuidadosamente el número de empleados que tienen acceso a nuestros sistemas y actualizamos con regularidad nuestros controles de seguridad".
"Por eso siempre será necesario que un número limitado de gente tenga acceso a estos sistemas si queremos que funcionen correctamente, de ahí que tomemos tan en serio cualquier violación", informó el vicepresidente de ingeniería de Google, Bill Coughran.
No queda claro si Barksdale se dedicaba con periodicidad a meter las narices en las cuentas de los usuarios, pero al parecer así era.
El ingeniero de 27 años accedió esta primavera a los datos de un adolescente de 15, de quien se había hecho amigo en un foro 'online' de tecnología de Seattle.
El experto accedió a los registros de llamadas de voz del servicio de 'Google Voice' cuando el chico se negó a decirle el nombre de su nueva novia.
Barksdale espió la cuenta del adolescente para obtener el número de teléfono de su novia y lo amenazó con llamarla. En otros casos, también con adolescentes de ambos sexos, Barksdale exhibió el mismo patrón a la hora de violar la privacidad de los menores.
Accedió a listas de contactos y transcripciones de conversaciones y desbloqueó de la lista de contactos de Gtalk a un adolescente que previamente había cortado la comunicación con el ingeniero de Google.
Según explicó el portal especializado, el acoso de Barksdale no parece ser, en un principio, de naturaleza sexual aunque su dinámica es "cuestionable" ya que el hombre invitó a alumnos menores de edad a ir al cine con él.