La empresa de Gates recibió una sanción récord de 899 millones de euros por no haber dado a sus rivales la información necesaria para fabricar programas compatibles con los suyos.
La empresa ha presentado un recurso de anulación de la decisión de la Comisión del 27 de febrero "en un esfuerzo constructivo para buscar claridad por parte del Tribunal".
La sanción recurrida es la más alta impuesta nunca por la autoridad europea de competencia a una sola empresa. Pero no es la única que Microsoft ha recibido por parte de la UE. Los 899 millones de euros se suman a otras dos anteriores de 497,2 y 280,5 millones de euros infligidas a Microsoft por abusar de su posición de dominio en el mercado informático y por no acatar las órdenes de Bruselas para remediarlo.