La compañía ha tenido que admitir el problema con el N8 después de recibir cientos de quejas de consumidores porque sus móviles se apagaban solos y después no podían encenderlos.
El jefe de ventas de Nokia, Niklas Savander, explicó que "un número limitado de usuarios del N8" estaban experimentando el problema provocado por un fallo en la producción, que ya estaba solucionado.
Añadió que el problema se limitaba al modelo N8, pero no quiso comentar el número de aparatos que se había visto afectado, porque no sería exacto.
"Probablemente no todos los consumidores han informado a Nokia de los problemas, así que el número final de productos defectuosos probablemente aumente", dijo el analista de Nordea Sami Sarkamies.
"Los problemas de hardware pueden ser complicados de encontrar y resolver", dijo. El fallo en la gestión de la energía deriva de la forma en que fue instalado el componente del motor - que incluye la mayoría de la tecnología del teléfono, excluyendo la carcasa y las baterías.
"Si contemplas el número total, es un número pequeño", según Savander en un vídeo que colgó la compañía en su web oficial. El N8 fue presentado por Nokia como la alternativa al iPhone 4, de Apple y será el primer modelo de los finlandeses con un sistema Symbian renovado.
El N8 destaca entre sus rivales por su cámara de 12 megapíxeles, pero un procesador más lento que el modelo Galaxy S de Samsung y el último iPhone de Apple.