La Unión Europea está preparando los detalles para la creación de una cartera digital que permitirá a los ciudadanos comunitarios el acceso unificado a diferentes servicios públicos, así como para pagar impuestos, guardar documentos de identificación o contraseñas de acceso a páginas de las administraciones nacionales o comunitarias.
La nueva cartera digital europea, cuyos detalles han sido adelantados por el Financial Times, será capaz de gestionar y almacenar de forma segura los detalles de los pagos, así como guardar las contraseñas de los ciudadanos de la UE para registrarse en páginas web gubernamentales, así como simplificar los pagos de impuestos, tasas y demás.
El proyecto para la creación de esta llamada cartera digital "con las claves al gemelo digital" de los ciudadanos europeos ya había sido anunciado a principios de 2021 por el comisario de política digital de la UE, Thierry Breton, pero ahora la Unión se dispone a presentarlo esta misma semana. Este "gemelo digital" será una especie de identidad digital de cada ciudadano de la UE.
La cartera será una aplicación, a la que se podrá acceder a través de mecanismos de autenticación biométrico como lectores de huella dactilar y sistemas de escaneo de retina, entre otros, para asociarla de manera segura a cada ciudadano. Su uso no será obligatorio pero concederá a los ciudadanos una mayor seguridad y flexibilidad.
Los ciudadanos comunitarios podrán utilizar esta cartera digital para almacenar muchos de sus documentos de identificación, como el DNI o el permiso de conducir, para así tener acceis al mismo desde cualquier parte y en cualquier situación. Este servicio mejorará la interoperabilidad entre países y se espera que el crecimiento del uso de servicios digitales durante la pandemia fomente su arraigo.
Para proteger la seguridad, la UE forzará una división estructural en su funcionamiento, de forma que las compañías externas no tengan acceso a los datos de usuario para usos no autorizados, como elaborar campañas de marketing o publicidad. Las instituciones comunitarias proporcionarán a los países miembros una serie de principios rectores sobre la implantación de los estándares técnicos, y se espera que su implementación esté completa en alrededor de un año.