Según este científico su sangre se compondría de metano líquido, por lo que todo su construcción química sería distinta por completo de la nuestra, basada en el carbono.
Este investigador basa sus afirmaciones en la falta de luz de este satélite, que recibe un 10% de la luz solar que llega a la Tierra. Precisamente por ello, sólo podrían desarrollarse organismos de crecimiento lento en este infierno helado, como los líquenes.
"Un velociraptor estaría prácticamente descartado", zanja con humor.
"Hollywood tiene problemas con los extraterrestres", bromea.
Su hipótesis dista mucho de estos seres de ficción, y "resulta más interesante por ese motivo. ¿No sería triste si lo más exótico que encontramos en la galaxia son seres parecidos a nosotros pero azules y con cola?", apunta.
Su investigación, desarrollada en Cambridge y en el Massachusetts Institute of Technology (MIT) trata de resolver cómo la vida puede abrirse paso en condiciones muy extremas.