Ming Li fue arrollada por un tractor que le cercenó la mano cuando ella iba camino de la escuela en julio pasado. Su brazo quedó demasiado dañado tras el accidente, por lo que los médicos decidieron colocar su mano temporalmente en uno de sus pies.
El aspecto era algo grotesco -como se ve en la imagen-, pero sirvió para dar tiempo a que se regenerara el tejido de su extremidad y fuera capaz de asimilar la reimplantación sin rechazarla.
La operación fue realizada en el hospital de Zhengzhou, en la provincia china de Henan. "Cuando ella llegó tenía su mano completamente separada de su brazo. Daba mucho miedo", contó Hou Jianxi, portavoz del hospital donde se realizó la intervención.
Sin embargo, " Ming Li ya puede mover la muñeca y su mano izquierda tiene un color rosado saludable, que demuestra que la circulación está bien", aseguró.
La niña necesitará todavía dos operaciones más , el próximo año, para mejorar las funciones de su mano y otra de cirugía estética para eliminar las cicatrices.
"Después de la cirugía y con un montón de fisioterapia, estamos seguros de la mano izquierda será capaz de hacer más cosas. "No podemos dar un porcentaje exacto del movimiento que podrá tener, pero ella será capaz de cuidarse a sí misma e incluso quizá podrá conducir un coche."