Nubes cuadradas: por qué se forma este complejo fenómeno de la naturaleza

  • Las nubes con esta forma se suelen producir por fenómenos como el viento o la condensación del agua

Estamos acostumbrados a ver nubes de infinitas formas y colores, pero quizá no te hayas topado nunca con estas. Las nubes cuadradas han sido explicadas a través de muchas teorías, algunas incluso apuntan a lo paranormal. No obstante, detrás de su verdadera razón se esconde, por supuesto, un motivo científico-meteorológico. Te lo contamos a continuación.

¿Cómo se forman?

Parecen pintadas o moldeadas, pero esta especie de alfombra que se genera en el cielo es natural. Son complejas de ver y se producen en momentos muy concretos. El cielo de Vietnam, por ejemplo, ha sido en más de una ocasión el escenario de estas nubes, como hemos podido comprobar en redes, donde los usuarios se preguntan si quizá son fruto de una obra de ingeniería. Pues no, su motivo de ser es mucho más sencillo.

Realmente, las nubes son estratos de gotas de agua microscópicas suspendidas en la atmósfera. Lo que sucede en esta ocasión es que estas nubes que están en la superficie terrestre no alcanzan las condiciones de condensación necesarias en los bordes, de ahí que no adquieran la forma típica redonda. El cielo se despeja a su alrededor y el resultado final es inverosímil.

Otras formas similares

Además, estas nubes cuadradas no suelen ser idénticas y podemos verlas de diferentes tamaños y estructuras. En otras ocasiones, suelen ser más altas y semejantes a un cubo de rubik. En este caso, lo que ocurre es que al crecer hacia arriba se encuentran con un tapón natural que no permite seguir formándose hacia los lados. Se debe a una inversión térmica que limita su crecimiento y da lugar a esta imagen en el cielo.

Otros meteorólogos han concluido que este tipo de nubes están relacionadas con las condiciones que presenta el aire en un momento determinado. Según ellos, la forma cuadrada se crea porque las vemos desde un ángulo diferente. Otros defienden que este caso tiene una relación directa con el viento. Cuando los estratos se encuentran bajos o cercanos a una zona marina, el viento suele recoger humedad del aire y perfilar las líneas rectas que vemos en las nubes en función de su movimiento.