El fabricante de sistemas de navegación TomTom pondrá en marcha un plan de reestructuración que incluirá despidos, después de cerrar los nueve primeros meses del año con unas pérdidas netas de 450 millones de euros, en comparación con las ganancias de 55,49 millones contabilizadas en el mismo período de 2010.
El consejero delegado de TomTom, Harold Goddijn, explicó que la naturaleza del sector en el que opera la empresa está cambiando, por lo que el grupo ha comenzado a implementar un plan de reestructuración que se centrará en las áreas con mayor potencia de crecimiento, como automóvil y contenidos y servicios.
Este programa, con el que la empresa espera generar un ahorro de 50 millones de euros sólo este año, incluirá un ajuste de efectivos que, Goddijn, sólo podrá implementarse parcialmente mediante bajas naturales.
"La reducción de la plantilla es un paso lamentable pero necesario para adaptar la compañía a las condiciones cambiantes de los mercados en los que operamos", añadió el consejero delegado de la corporación. La compañía precisará más detalles sobre la reestructuración a finales de año.
La cifra de negocio de la compañía alcanzó 915,81 millones de euros entre los pasados meses de enero y septiembre, lo que se traduce en una reducción del 8,8 por ciento en comparación con el mismo período del ejercicio del ejercicio precedente.
En el tercer trimestre del año, el beneficio neto de TomTom experimentó un crecimiento del 50 por ciento, hasta situarse en 29 millones de euros, mientras que la facturación alcanzó 336 millones de euros, con una disminución del 10 por ciento.