Daniel Radcliffe ha luchado, en sentido figurado, contra los dragones más feroces, se ha enfrentado a sirenas furiosas y ha derrotado a los dementores más horribles durante su papel como Harry Potter en la exitosa saga. Y parece que la versatilidad de Daniel Radcliffe a la hora de tratar con las criaturas desconocidas no ha disminuido desde entonces.
El actor parecía encantado cuando se presentó en el escenario no uno sino dos pingüinos en vivo a los que el joven actor tenía que alimentar. Además de Radcliffe, y los pingüinos, en el programa estaba el naturalista británico, ganador del Premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales en 2009, Sir David Attenborough. Sir David miraba atentamente y con indulgencia, como el actor presentó al pingüino con un delicioso y tentador aperitivo. Además, expresó y comento su temor por el calentamiento global.
En una breve entrevista Daniel, ante su tan conocido personaje, dijo que “encanta Harry Potter en Japón. Tuve mi verdadero Beatle-manía, una experiencia, cuando yo estaba allí caminando por un pasillo de la escuela”. "Yo estaba de visita en una escuela japonesa por algo de publicidad. Me apartó una joven colegiada mientras caminaba junto a ella y le dije: ‘Oh, lo siento mucho’, y al verme se desmayó”, afirmó.