Desconcierto en una playa de Japón. Una mujer que paseaba con su marido encontró una bola enorme de hierro en la playa de Enshuhama, en Hamamatsu, el pasado martes y avisó a las autoridades. La policía que se desplazó al lugar de los hechos acordonó un perímetro de 200 metros hasta identificar el tipo de material metálico y tras dar parte se desplazaron hasta el lugar expertos de las Fuerzas Armadas y de la Guardia Costera japonesa para analizarlo.
La prensa local señaló que el objeto de 1,5 metros de diámetro está oxidado y tiene un saliente en forma de asa que permitiría engancharlo a otro elemento. Y, según diversos informes televisivos, un escáner de rayos X reveló que estaba hueco.
Especialistas en explosivos, como se ve en vídeos difundidos, rodearon el objeto y determinaron que no había riesgo de un posible estallido, por lo que levantaron las restricciones en el área acordonada. Un detalle que se conoce por medios japoneses de la misteriosa esfera es que tiene dos puntos de enganche en los polos opuestos algo que, según fuentes locales, hace que la bola pueda parecerse a una mina submarina, aunque ya se haya descartado el peligro de explosión.
Fotografías del objeto se enviaron a las Fuerzas de Autodefensa de Japón y a expertos de la guardia costera. Esta aparición surge en un momento donde hay gran interés por los descubrimientos de objetos no identificados en distintas partes del mundo luego de que Estados Unidos derribara el 4 de febrero un globo chino que según Washington forma parte de un programa de espionaje y que para Pekín tenía solo fines meteorológicos. Pero algunos, como el Nostradamus de las redes sociales confiesa que el fin del mundo está cerca.