Los niños de una iglesia, de St Louis, lo dibujaron así y después, entre todos pegaron sobre el perfil de la sagrada figura sus huellas de las manos, recortadas en papeles de diferentes colores.
El resultado es Jesús vestido como para ir a una discoteca. La barba y la forma de la cara son inconfundiblemente similares a Chuck Norris o al menos así con estas pintas ven los niños a Jesús.
Los comentarios de los usuarios de la red social elogian la visión de los niños sobre Jesús y dan la suya propia. Cada uno lo ve a su manera, como un vagabundo, mientras otros coinciden de que ciertamente es como Chuck Norris con un traje technicolor fabuloso.