Los hombres de Zidane necesitaban conseguir una victoria ante el Valencia en casa para seguir vivos en LaLiga después de la derrota en casa frente al Barcelona. Por su parte, los valencianistas no se jugaban mucho en la clasificación pero querían complicar el título al Real Madrid.
El encuentro empezó con sorpresa en la alineación. Zidane no alineó de inicio a Isco y decidió colocar a James en el once, para sorpresa del madridismo. No jugó ni un minuto del partido, a diferencia de Asensio que salió en la segunda parte.
La tarde empezó con susto del Valencia después de una doble ocasión de Santi Mina que terminó estrellándose en el palo. El Real Madrid tomó las riendas del encuentro y empezó a rondar la meta de Diego Alves. Cristiano, después de un gran centro de Carvajal, fue el encargado de abrir el marcador tras un gran remate de cabeza.
En la segunda parte, siguió el mismo guión y mismo marcador. Diego Alves paró un penalti a Cristiano Ronaldo. Parejo enmudeció al Bernabéu después de hacer el empate desde un lanzamiento de falta. El madridismo empujó y Marcelo desató la locura al marcar el gol de la victoria.