Las empresas con trabajadores en ERTE de aquí a septiembre tendrán bonificaciones del 70%

  • Escrivá dice que las exenciones en ERTE son muy generosas

  • El jueves, Consejo de Ministros con o sin acuerdo

  • Garamendi sobre Escrivá: Está en un "laboratorio" y "muy poco en la realidad"

El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, ha asegurado que el Gobierno está siendo "extraordinariamente generoso" con las exoneraciones que ha propuesto en la negociación para prorrogar los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) hasta el 30 de septiembre. Escrivá ha dicho en declaraciones a El Programa de Ana Rosa que se están planteando exenciones para los trabajadores que se queden en ERTE del entorno del 70%-60%, frente al 35% de mayo y junio de 2020.

"El año pasado terminamos septiembre en una bonificación del 35% y ahora estamos hablando del 70%. Es el doble. Y son más altas para las empresas que sacan trabajadores del ERTE. Estamos proponiendo que en junio no se cambien las condiciones actuales, pero a partir de julio, agosto y septiembre tenemos que dar el mensaje de que esto va a ir a mejor. Es importante que ese mensaje hacia la normalidad cale", ha apuntado.

Consejo de Ministros extraordinario

Escrivá ha afirmado que las diferencias con sindicatos y empresarios son "pequeñas" y se ha mostrado convencido de que se llegará a un acuerdo con los agentes sociales para extender los ERTE hasta después del verano en el día y medio que resta hasta la celebración del Consejo de Ministros extraordinario, que ha anunciado que se celebrará mañana por la tarde.

El ministro, en declaraciones a El Programa de Ana Rosa de Telecinco, ha indicado que se ha puesto el énfasis en la reactivación de los trabajadores en ERTE con un esquema de exoneraciones a la Seguridad Social "más favorable y generoso" que el que se puso en marcha el verano pasado y que sí apoyó la CEOE.

La patronal, en desacuerdo

"Nos quedan unos 400.000 trabajadores en ERTE y en la vida los incentivos son fundamentales", ha defendido. Es más, el ministro ha hecho notar que en la actual negociación de la prórroga de los ERTE, la patronal no ha puesto el foco sobre la eliminación de la cláusula de mantenimiento del empleo, como sí hizo en la negociación de las prórrogas anteriores.

"La cláusula de despido no ha estado esta vez sobre la mesa, pero en las cuatro negociaciones anteriores fue un tema de fricción. La patronal puso el énfasis en eso, no en lo que lo está poniendo ahora: intentar prorrogar el sistema actual de exoneraciones y mantenerlo tal cual ha estado vigente en otoño y en invierno", ha explicado.

No obstante, Escrivá ha insistido en que las condiciones actuales no son las mismas que en los meses pasados y se parecen más a las del verano pasado, razón por la que se ha planteado un esquema similar e incluso "más favorable" al de entonces.

Todo el Ejecutivo a una

En todo caso, el ministro ha subrayado que el Gobierno está haciendo un "esfuerzo de aproximación" con las posiciones de los agentes sociales, sobre todo con la patronal, pero ha dejado claro que la postura del Ejecutivo "es la que es", sin distinciones dentro del Gobierno, y que, aunque intentará convencer a los agentes sociales en los próximos días, el fin último de la prórroga de los ERTE no es el acuerdo social.

"Lo que está claro es que el acuerdo no es el fin, sino diseñar las políticas adecuadas y si se consigue con el mayor acuerdo, mejor. Pero en ningún caso y en ningún ámbito el acuerdo es el fin. Lo que voy a hacer es intentar convencer el otro lado de cuál es el interés general y de todos", ha afirmado.

Y el interés general, según Escrivá, es el de incentivar la reactivación de trabajadores del ERTE para que se incorporen al empleo en un entorno en el que se está constatando "una clara recuperación", con datos de reservas turísticas "muy favorables" y un nivel de afiliación a la Seguridad Social que ya está por encima del que se tenía antes de la pandemia.

Se crea empleo más rápido que se sale del ERTE

Sin embargo, Escrivá ha advertido de que, a pesar de que se está creando ahora muchos puestos de trabajo en sectores como la hostelería, la salida de los trabajadores de ERTE está produciéndose a un ritmo "mucho más lento" del que está generando empleo, por lo que "hay que tener cuidado de que esto no se nos enquiste". "Esto nos convence de que hay que seguir impulsando la reactivación de trabajadores en ERTE", ha añadido.

Asimismo, Escrivá ha subrayado que al tratarse de una negociación que trata de repartir subvenciones y ayudas a empresas y trabajadores, "de forma natural e inevitable" existe una "cierta coalición" entre los agentes sociales para maximizar las ayudas. "Pero quienes tienen la restricción presupuestaria somos nosotros, no ellos, y hay límites donde no se puede llegar", ha explicado.

La postura de la patronal

El presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Antonio Garamendi, ha dicho en una entrevista en RNE que el Ministerio de Trabajo y Economía Social entiende la preocupación de empresarios y sindicatos y tiene "más sensibilidad", mientras que "Seguridad Social parece que está en un laboratorio" y “no en la realidad”.

De hecho, el presidente de los empresarios ha afirmado que lo que ellos están planteando tiene "mucho menos coste" que la propuesta del ministro. Además, ha retado a Escrivá a que le dé los datos de sus medidas, "porque ahí es donde está el coste elevadísimo que hemos tenido con los ERTE" y porque "hace un año que no los reciben".

"Ha quedado ampliamente demostrada que nuestra vocación total es la de llegar a acuerdos y hemos alcanzado acuerdos complicados, como el del teletrabajo o los 'riders'. Estamos totalmente volcados y el ministro simplemente lo que tiene que cambiar es dar un poco menos a los que se van a activar, ya que no tiene sentido", según Garamendi.

El presidente de la patronal ha subrayado que "la gente quiere trabajar" y que si hay fraude, "hay una cosa que se llama Inspección de Trabajo". "No digo que no se persiga al que lo haga mal, pero lo que no me vale es que prácticamente se ponga encima de la cabeza de todo el mundo como que 2,4 millones de personas no querían trabajar", ha añadido, tras insistir en que esto no son ayudas, sino compensaciones.

El presidente de CEOE ha recordado que la gente no está cerrada por voluntad propia, sino como consecuencia de decisiones administrativas. "Hay que defender a la gente que está en una mala situación", ha pedido.

La recuperación “va a tardar”

La posición de la patronal, según su presidente, parte de que en estos momentos no ha llegado todavía la inmunidad de grupo, lo que, "tristemente" va a hacer que la economía no esté en las condiciones que se pensaba, sino que "va a tardar un poco más" en entrar en la nueva normalidad.

"La fórmula que propone el ministro es más cara de la que estamos pidiendo, ya que lo que está planteando es dar dinero a los que van a empezar a trabajar y la gente, cuando trabaja, es porque tiene demanda. Un bar, restaurante u hotel abre sus puertas, porque va a tener gente, no porque el ministro le vaya a dar 100 euros", ha criticado Garamendi.