Los trabajadores de astilleros siguen en pie de guerra. Hoy vienen a Madrid con sus reivindicaciones coincidiendo con la presentación del "documento de trabajo para el futuro de Navantia 2014-2018" en la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales.
El documento de la empresa pública no prevé cierre de centros ni reducción de plantilla, pero los trabajadores no lo ven claro porque Navantia no tiene más encargos. “Si no hay carga de trabajo no puede haber futuro", asegura un empleado.
En la sede de Ferrol no hay pedidos para continuar con la actividad del astillero y en Cádiz ya no hay trabajo para la mitad de la plantilla. Esa es la queja de los 5.500 empleados del grupo, que no tienen trabajo. "No sé si es por incompetencia o si realmente no se tiene ganas de conseguir contractos".
Hasta el 31 de octubre Navantia había presentado 111 ofertas en 32 países, sin éxito alguno. El año pasado perdió 78 millones de euros y a pesar de ello la dirección de la empresa pública asegura que no prepara expedientes de regulación de empleo. Pero apostilla que Navantia, para tener futuro, "debe acometer transformaciones para ser más competitiva".