El río Po se seca: graves consecuencias en Italia por la histórica sequía

El río más largo de Italia se seca. La situación de “sequía extrema” en todas las estaciones de monitoreo a lo largo del Po empieza a plantear problemas al suministro y a la navegación, incluso se prevé cancelar los cruceros fluviales por la poca profundidad del agua en su cuenca. Gran parte de Europa lleva en sequía desde 2018.

La nieve que cae durante el invierno normalmente evita que los 652 kilómetros del Po se sequen por completo durante el cálido verano, pero este año ha caído un 75 % menos de lo habitual. Y la histórica sequía amenaza con graves consecuencias no solo para el norte de Italia, sino para todo el país.

La sequía en Italia es de las peores que se han vivido

El lago de Garda se encuentra alrededor del 38 por ciento de su capacidad, su nivel más bajo desde 1953; el lago Maggiore está al 43 %, y el lago de Como al 23,5 %. Esto está trayendo enormes problemas a los agricultores italianos, que se abastecen de estos cuerpos de agua.

El Gobierno italiano ha nombrado incluso un comisario especial para la sequía, para preparar un plan hidrológico, acelerar las obras esenciales para hacer frente a la falta de precipitaciones, y lanzar una campaña de concienciación, además de supervisar la construcción de infraestructuras hidráulicas y la gestión de los embalses.

El verano pasado, Italia declaró el estado de emergencia en cinco regiones del norte del país debido a la sequía, y el gobierno anunció 36,5 millones de euros en fondos de emergencia para ayudar a las zonas afectadas, recuerda iAgua.