28M, una jornada electoral de infarto: multitud de territorios están en juego sin un escenario claro

Este 28 de mayo será una jornada electoral de infarto con multitud de territorios en juego y en los que no hay nada claro. Los candidatos se han centrado durante la campaña precisamente en esos territorios que podrían perder por solo unos pocos miles de votos.

A partir de lunes llegará el momento de tejer esas alianzas que definan el nuevo mapa político de comunidades y ayuntamientos.

Un puzle de apoyos tras las elecciones

A unas horas de las urnas, sin sondeos públicos por ley desde el martes, es tiempo de colores de mercado, metafóricamente hablando, en los búnkeres electorales. El objetivo defender lo que se tiene y/o revertir lo que no, según los intereses, dentro del tablero de la última legislatura.

De las 12 comunidades que renuevan sus parlamentos y gobiernos este 28M, 9 tienen presidencias del PSOE, 2 del PP y una del Partido Regionalista de Cantabria, con Revilla al frente. Uno de los territorios más en disputa y sobre el que los dirigentes nacionales de los principales partidos han priorizado sus mítines. Así ha ocurrido, también, con la Comunidad Valenciana, con un nuevo pacto a tres del Botànic dependiente de la entrada o no de Unidas Podemos y sobre la que los populares, Vox mediante, quieren proyectar su destino sobre las próximas elecciones generales.

Autonomías de futuro incierto sobre las que se vuelcan esfuerzos. Sabedoras de que, sin mayorías absolutas monocolor, más próximas en unas que otras, habrá que recurrir a las coaliciones. Un panorama semejante en las municipales, donde PSOE y PP se reparten la alcaldía de 2/3 de las capitales de provincia, con seis bastiones electorales, que destacan sobre otros, como joyas a conquistar entre equilibrios de fuerzas. Así se espera en Madrid, donde el destino de Ciudadanos y Podemos se antoja clave en la suma para la vara de mando. Un puzle de apoyos aún más difícil de encajar sobre el papel en Barcelona, con escenario abierto a varias alcaldías.