La Guardia Civil ha publicado un vídeo en el que nos muestra cómo la madrugada del jueves pasado una avalancha de cuatrocientos subsaharianos baja desde bosque hacia el puesto fronterizo entre Marruecos y Ceuta. Las fuerzas de seguridad marroquíes intentan frenarlos. Ellos se dirigen hacia la playa del Tarajal. La Guardia Civil resalta los planos en los que los inmigrantes les lanzan piedras. Lo que no muestra es que unos 250 se echaron al mar para tratar de entrar en España bordeando el espigón. Quince murieron en el intento. Varias ONGS han pedido que se investigue esta actuación. El Gobierno también defiende lo que sucedió después. La Guardia Civil devolvió a los supervivientes a Marruecos por la orilla y en otra actuación del verano pasado que denuncia la ONG Prodein, una lancha de la Guardia Civil avista a dos inmigrantes en el agua y en lugar de socorrerles los arrastra unos metros y les suelta para que lleguen a nado a tierra. Interior al asegurar que estuvieron en aguas marroquíes en todo momento y, por tanto, niega que se trate de una deportación. La ONG Human Rights Watch pide a España que detenga las devoluciones en caliente que considera ilegales.