Arranca una nueva semana de campaña de vacunación con otro envío masivo de dosis de Pfizer. La ministra de Sanidad, Carolina Darias, ha recibido el cargamento que, por tercer lunes consecutivo, es de un 1 200 000 dosis. Son vacunas suficientes ya para, por ejemplo, que todos los mayores de 80 años tengan al menos una dosis inoculada.
La gran novedad del día es que Sanidad ya estudia la posibilidad de retrasar ocho semanas las segundas dosis. Espaciar los pinchazos, en lugar de 21 días entre la primera y la segunda dosis de Pfizer o de Moderna, que sean 42 días. De esa forma, se ganaría tiempo y se podría vacunar a mucha más gente con al menos una dosis.
La propuesta de Sanidad se ha llevado con éxito en países como Gran Bretaña o Israel y que en España apoyan comunidades como Cataluña y Madrid. Mañana, las comunidades lo discutirán en la comisión de Salud Pública.
Los pacientes que están recibiendo ahora su primera dosis con vacunas de Pfizer y Moderna tienen menos de 79 años. La segunda les tocaría en tres semanas, pero el plan del Gobierno es retrasarla al doble del tiempo. El objetivo es acelerar en número de personas con al menos una parte de la inmunización.
Los envíos de Pfizer seguirán creciendo. "A parir del 26 de abril y durante todo el mes de mayo de Pfizer vamos a recibir cada semana 1 700 000 dosis", comunicaba la ministra de Sanidad.
Esta semana se esperan también dosis de Moderna y de AstraZeneca. Para toda España habrá unas 400 000 mil dosis de AstraZeneca. Además, previsiblemente mañana se liberarán las dosis de Janssen de las que se encuentran 143 000 dosis almacenadas.
Con estas previsiones, los macrocentros de vacunación situados en España volverán a recuperar su actividad masiva de hace unos días porque hoy la falta de dosis los dejaba a medio gas.