Fin al caos de los patinetes en Vilagarcía, Pontevedra: comienza una campaña de control en las calles
Los patinetes estuvieron implicados en 21 accidentes en Vilagarcía el año pasado
Aumenta el uso de patinetes para mover pequeñas cantidades de droga por la ciudad
A finales de marzo, una joven de A Coruña atropelló con su patinete a una anciana de 85 años y se dio a la fuga
PontevedraAceras, plazas y parques bajo vigilancia. A partir de esta semana, los patinetes eléctricos que circulen fuera de la norma en Vilagarcía de Arousa lo van a tener más difícil. La Policía Local inicia una campaña de control que se extenderá hasta el domingo y que pone el foco en el uso indebido de los VMP (vehículos de movilidad personal), especialmente en zonas peatonales y en espacios sensibles como la plaza de Galicia o el entorno de A Xunqueira.
De juguete nada: son vehículos
Aunque cada vez son más presentes en el paisaje urbano, muchos usuarios, especialmente menores, siguen utilizando los patinetes como si fueran juguetes. "Muchos de estos vehículos se están usando desde el desconocimiento, como si fueran juguetes", advierte la Policía Local. Pero no lo son. La normativa es clara: solo una plaza, sin acompañantes, sin auriculares ni móvil al volante, y prohibido circular por aceras o zonas peatonales. Y por supuesto, nada de alcohol o drogas al manillar.
Pese a ello, son habituales las escenas de imprudencia sobre ruedas: giros sin mirar, adelantamientos temerarios, conducción temeraria o patinetes zigzagueando entre peatones. Según la Policía, muchos de estos comportamientos responden al desconocimiento, pero otros nacen directamente del incumplimiento consciente de las normas.
Más accidentes que las bicicletas
La preocupación no es gratuita. El año pasado, los VMP estuvieron implicados en 21 accidentes en Vilagarcía, superando a las bicicletas y acercándose a las cifras de motos y camiones. Dos de ellos fueron atropellos a peatones, cinco colisiones con coches o camiones, y el resto, caídas. A este balance se suma otro dato inquietante: el uso creciente de patinetes para mover pequeñas cantidades de droga por la ciudad porque permite realizar muchos viajes con cierta rapidez.
Concienciar para convivir
La campaña busca tanto sancionar como informar. Los agentes actuarán mañana y tarde, y no solo vigilarán, sino que explicarán a los conductores las normas que deben cumplir. La idea es que manejar un patinete implique la misma responsabilidad que cualquier otro vehículo: respeto, prudencia y sentido común. Porque compartir el espacio público depende de todos.
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