Fin de la veda del pulpo gallego: el rey de gastronomía vuelve a los mercados
La veda es un proceso habitual para contribuir a la explotación sostenible de pulpo
Arranca la veda del pulpo gallego: tres meses sin pesca para recuperar la especie
Santiago de Compostela, A CoruñaTras un mes de parada biológica y dos de veda, desde este 1 de julio se podrá volver a capturar pulpo en las aguas gallegas. Esta parada en las extracciones de pulpo está incluidas en el plan del pulpo, aprobado con la finalidad de ajustar la gestión pesquera al ciclo de vida de la especie y así proteger su reproducción y contribuir a una explotación sostenible de este recurso pesquero.
La pasada semana se celebró una reunión de trabajo en la Consellería do Mar con los responsables de las cofradías, para realizar un seguimiento del plan experimental para la gestión de este recurso, aprobado en marzo.
Se podrán pescar 35 kilos por embarcación al día
En el encuentro, no se decidió variar ni los kilogramos marcados como captura máxima ni las especies acompañantes que se pueden capturar, como también se confirmó que permanecerán igual los horarios. En función de la evolución de la campaña, las cuotas máximas diarias de captura y desembarco podrán ser sustituidas por topes semanales.
Así, las cifras reflejadas en el plan aprobado en marzo se mantienen. Y las capturas máximas para el periodo de julio y agosto, se sitúan en un máximo de 35 kilos por embarcación y día, más 35 kilos por tripulante y día (hasta alcanzar un máximo de 240 kilos de pulpo por día). En el resto de la campaña se podrán capturar un tope de 55 kilos por barco y día, más otros 55 kilos por tripulante y día, hasta llegar a una cifra máxima de 380 kilos diarios.
Importante labor de vigilancia
Durante estos meses de veda, se desarrollaron varios operativos de vigilancia contra el furtivismo, coordinados por el servicio de Gardacostas de Galicia, y que durante estos meses incautaron nasas y cacharros de pulpo a lo largo de la costa. Además, lograron recuperar más de 1.700 kilos de pulpo capturado ilegalmente y que fueron devueltos al mar.
Durante estos meses de paro, y como novedad, se ha establecido una línea de ayudas para los pescadores. Propietarios y tripulantes de las alrededor de 2.800 embarcaciones gallegas autorizadas a pescar pulpo han podido acceder a esta línea de ayudas, que cuenta con el apoyo económico al sector afectado al amparo del Fondo Europeo Marítimo, de Pesca y Acuicultura (Fempa).
A pesar del parón en las capturas, el pulpo, uno de los platos estrella de la gastronomía gallega ha seguido presente estos tres meses en los mercados y en las cartas de los restaurantes, ya que desde hace varios años, y dado que el pulpo autóctono no es suficiente para la demanda del mercado, la importación ofrece producto durante todo el año para cubrir esa demanda permanente.
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