El Gobierno de Francia supera las dos mociones de censura con el apoyo de los socialistas
La moción promovida por la izquierda de la Francia Insumisa se queda a 18 votos de tumbar el Gobierno
Nuevo Gobierno de Francia: Lecornu reúne a técnicos y políticos para sacar de la crisis política
El Gobierno de Francia, liderado por Sébastian Lecornu, ha superado este jueves las dos mociones de censura que amenazaban su continuidad. La posición del Partido Socialista ha sido decisiva para evitar que las iniciativas del partido de izquierda, La Francia Insumisa y la segunda impulsada por la extrema derecha, de Marine Le Pen, tumbaran al gobierno, recién elegido.
Lecornu consiguió el apoyo, no sin polémica del grupo socialista que ha optado por conceder un mínimo tiempo al primer ministro tras su promesa de retrasar la puesta en marcha de la reforma de las pensiones. El líder socialista, Olivier Faure, advirtió, poco después de la votación, que "si el Gobierno no cumple sus promesas", respecto "a la suspensión de la reforma de las pensiones", lo censurarán "rápidamente".
La primera de las mociones promovida por La Francia Insumisa (LFI) ha obtenido 271 votos a favor, 18 menos de los que necesitaban para la caída del Ejecutivo. La ultraderechista Agrupación Nacional, fue segunda en el turno de presentar su moción, aunque solo han obtenido 144 síes y la izquierda no se ha sumado.
Lecornu pidió votar entre el "orden republicano y el desorden"
Lecornu ha marcado antes de la votación una diatriba entre el "orden republicano" y el "desorden" para pedir un mínimo tiempo de confianza y, en un mensaje a los partidos opositores, les ha instado a no acelerar los plazos, porque "las elecciones presidenciales se celebrarán" y "habrá tiempo de hacer campaña".
El primer ministro de Francia les ha acusado de tomar los presupuestos generales como "rehenes" de intereses partidistas, apelando de nuevo a un consenso para sacar adelante antes de que acabe el año las cuentas públicas de 2026.
Desde las filas de Agrupación Nacional, Marine Le Pen, sin embargo, ha reconocido que en su grupo existe una "impaciencia creciente" por ir a las urnas, mientras que los partidos aliados del presidente, Emmanuel Macron, "hacen todo lo posible para evitarlo". "Volveréis, con la cabeza gacha y el rostro abatido, con la vergüenza de quienes solo ganaron tiempo", ha asegurado Le Pen desde la tribuna, según la cadena BFM TV.