El marido de la Reina Isabel II de Inglaterra ha recibido hoy el alta en el hospital tras permanecer 4 días ingresado. Tal vez una de las únicas buenas noticias para la reina en este fin de año. El duque de Edimburgo de 98 años ha salido por su propio pie del hospital donde le atendieron por una afección que ya padecía y de la que no se han dado detalles. El duque se ha trasladado a la residencia oficial donde pasará la Nochebuena junto a la reina en las que pueden ser una de las navidades más amargas de los últimos años.

Sí, porque la Reina reconocerá en su mensaje de fin de año que ha vuelto a vivir un annus horribilis y lleva unos cuantos. Si Carlos y Diana fueron un dolor de cabeza en el pasado, este año su preferido, Andrés, señalado por el caso Epstein ha puesto de nuevo a la monarca contra la espada y la pared. Se nota en las fotos del mensaje de Navidad. Ni rastro de Andrés, ni tampoco de Meghan y de Harry. Borrados de escena. En la imagen avance del mensaje navideño de la Reina televisado mañana hay mucha información. Están Carlos y Camila, su marido, su nieto Guillermo, Kate y los niños y su padre. Los grandes ausentes son Harry y Meghan. El año pasado hubo dos fotos de ellos. Se han ido a Canadá. No les verán en Navidad. Tan solo han enviado una felicitación con el pequeño Archie de 8 meses.

El 2019 y a sus 93 años, ha sido un año de turbulencias. La Reina lo reconoce. Ha apartado de la vida pública a su hijo Andrés. Si le añadimos la tensión confesada entre sus nietos, la lucha de Meghan por adaptarse a la realeza y el accidente de tráfico de su marido provocando dos heridos, el resultado es un mal año, de los peores desde la muerte de Lady Di.

"Pequeños pasos dados en la fe y en la esperanza pueden superar las diferencias y las divisiones profundamente arraigadas para brindar armonía y comprensión. El camino, por supuesto, no siempre es suave, y puede que a veces este año se haya sentido lleno de baches, pero pequeños pasos pueden hacer una gran diferencia”, dirá la Reina en clara referencia a su familia, según los analistas.

Su transmisión anual estará dirigida principalmente a temas nacionales en un año dominado por Brexit y una elección general. Se espera que Andrés, de 59 años, vea la transmisión televisada de su madre a la nación con el resto de la familia en Sandringham mañana.

En ese año, Charles se separó de la princesa Diana, Andrés se separó de su esposa Sarah Ferguson, la princesa Anne se divorció del capitán Mark Phillips y un incendio envolvió el castillo de Windsor. No gana para disgustos la Reina, aunque resistir, resiste.