Beata Mona Lisa, la hermana de Greta Thunberg, gana popularidad en el mundo de la música y del feminismo

  • Sufre un trastorno de hiperactividad que le dificulta las relaciones

  • Su padre es actor y su madre una conocida cantante de ópera

Uno de los actuales iconos de esta lucha contra el cambio climático es la ya famosísima Greta Thunberg. La adolescente sueca sigue en altamar, camino de la costa portuguesa, en su intento de llegar a la cumbre de Madrid sin contaminar. Un activismo al que también se apunta su hermana pequeña, pero en su caso a ser un símbolo del feminismo. Vayan quedándose con su nombre: Beata Mona Lisa.

En el Atlántico, a solo 460 kilómetros de la costa peninsular navega rumbo a Lisboa Greta Thunberg (Tunberi). Confía en desembarcar el martes, como anuncia a sus once millones de seguidores, fieles que se empezó a ganar con sus viernes por el futuro. Todo un fenómeno. Y como tal, con simpatizantes y detractores, que solo ven marketing y a sus padres detrás.

Svante es actor, productor y representante. Pero también sobrino nieto del premio Nobel de química en 1903 Svante Arrhenius, el primero que calculó cómo el incremento del CO2 en la atmósfera calentaría el planeta.

Malena es cantante de ópera, que terminó de hacerse famosa en su país por Eurovisión. Una peculiar pareja ya de por sí conocida en Suecia antes de que su hija, deprimida por el medio ambiente, decidiera combatir la contaminación.

No solo comprensivos con la niña, y su síndrome de Asperger, sino también convencidos por ella. Él ha dejado de comer carne. Ella, de actuar fuera de Estocolmo. Aquí está cantando con su otra hija. Se llama Beata Mona Lisa, Bea para los amigos. 14 años y una incipiente carrera musical. A rebufo de su hermana, también está ganando popularidad. Como cantante y, como apuesta su madre, como feminista. No en vano, también ella padece un trastorno, que le dificulta las relaciones en el colegio.