Comienza el juicio contra tres de los ex policías involucrados en la muerte de George Floyd

  • Alexander Kueng, Thomas Lane y Tou Thao se enfrentan a cargos por violar los derechos civiles de George Floyd

  • Los tres ex-agentes no prestaron ayuda a George Floyd mientras Derek Chauvin le pisaba el cuello durante 9 minutos

  • Al contrario que Chauvin, se han declarado inocentes de los cargos que se les imputan

Los tres ex-policías que ayudaron al agente Derek Chauvin a contener a George Floyd en una calle de Minneapolis en mayo de 2020 serán juzgados en una corte federal a partir de este pasado lunes por violar los derechos civiles de Floyd, que murió asfixiado tras su detención. Se trata de los ex agentes J. Alexander Kueng, Thomas Lane y Tou Thao.

Están acusados de violar los derechos civiles del afroamericano, por no socorrerle cuando Derek Chauvin le aplastaba el cuello con su rodilla. Según la fiscalía, los policías deberían haber protegido a la persona que tenían bajo su custodia e impedido que se abusara de él. Chauvin, que se declaró culpable y llegó a un acuerdo con la fiscalía, ya fue condenado a 22 años de cárcel por estos hechos.

Acusados de no prestar ayuda a George Floyd

Los tres es agentes se enfrentan a cargos de violación de derechos bajo el pretexto de la ley por supuestamente no proporcionar asistencia médica a Floyd aquel fatídico día. Thao y Kueng, además están acusados de no intervenir en el uso de "fuerza irrazonable" de Chauvin, cuando se arrodilló sobre el cuello y la espalda de Floyd durante más de 9 minutos. Los agentes avisaron a los servicios médicos pero no proporcionaron ayuda a Floyd, quien había quedado inconsciente en el suelo, sin respiración.

Al contrario que Chauvin, Kueng, Lane y Thao se declararon inocentes de los cargos federales que se les imputan. El juicio, que comienza 20 meses después de la muerte de George Floyd, contará con un jurado popular formado por cinco hombres y siete mujeres.

Un vídeo grabado por un transeunte mostró como George Floyd le pedía al agente que le dejara de presionar el cuello, avisándole de que no podía respirar, mientras llamaba a su madre. El vídeo, publicado pro varios medios de comunicación, desató una inmensa ola de indignación en todo el país y provocó protestas y fuertes disturbios, aumentando el movimiento social contra la brutalidad policial y la injusticia racial.